(ANS – Estrasburgo)– Veinticuatro participantes, catorce nacionalidades diferentes representadas, trece organizaciones, siete jornadas, un objetivo: la educación en Derechos Humanos.

Del 7 al 14 de julio en el Centro Europeo de la Juventud de Estrasburgo, el Don Bosco Youth Net (DBYN) y el Consejo de Europa organizaron una sesión de estudio titulada "Orientando el DBYN hacia la educación en Derechos Humanos". La sesión sirvió para formar a los jóvenes responsables y animadores de los distintos grupos, sobre el tema de la educación en los Derechos Humanos - un valor fundamental del Consejo de Europa - y que se ha propuesto como una continuación de lo que se ha logrado en el Congreso Mundial sobre el Sistema Preventivo y Derechos Humanas, que tuvo lugar en la Casa Generalicia de los Salesianos en enero de 2009.

Los conocimientos previos y los niveles de experiencia de los participantes fueron muy diversos. Algunos hacían parte ya de la red DBYN desde hace varios años, otros solo muy recientemente, y otros llegaron desde el extranjero solo para obtener una panorámica de la visión europea sobre los Derechos Humanos; pero todos han participado interesados, con el deseo de profundizar el asunto, conocer nuevos retos, nuevas personas y aprender algo que luego enseñarán a los demás, según el espíritu de Don Bosco.

Después de diversas dinámicas para promover el conocimiento mutuo y el compartir, la semana comenzó con una aproximación teórica a los temas de los Derechos Humanos. Sin embargo, la práctica ha sustituido a la teoría y los jóvenes participantes han ejercitado concretamente sus competencias, haciendo trabajos en grupo, siempre bajo la atenta mirada del equipo organizador del evento. Los chicos trabajaron con la creatividad y, conscientes de la importancia del análisis de los resultados y la observación crítica de lo externo, también acogieron positivamente las evaluaciones de los responsables del curso. Todos los jóvenes fueron unánimes en reconocer la preparación y la eficacia del grupo de coordinación.

Esta sesión de estudio del DBYN tenía un gran significado y expresó varias cosas: la voluntad de los jóvenes animadores y responsables de mejorar sus propias capacidades de formación; la oportunidad de conocer mejor acerca de los Derechos Humanos y de educarse a sí mismos en este tema específico, para luego transmitir a los otros las competencias necesarias. También fue una oportunidad para conocer gente nueva, crear una red dentro del DBYN, trabajar con un equipo de formadores cualificados, hacer una bella experiencia y tener muy buenos recuerdos.

"¿El mejor recuerdo de la semana? Jueves por la noche. - Dijo uno de los jóvenes que participó en la sesión de estudio - Fuimos a la ciudad juntos y en cierto punto todos nos reunimos en frente de la Catedral con el fin de crear un juego de grupo. Poco a poco, los turistas y las personas que pasaban, estaban intrigados y comenzaron a participar también ellos: personas que no se conocían entre sí, que tal vez nunca habían oído hablar del DBYN antes, pero que simplemente quisieron participar en la actividad, para estar unidos a otras personas y compartir un buen momento".

El DBYN está trabajando duro para integrar cada vez más los Derechos Humanos en su estilo de trabajo. Esta semana, en Bélgica, está previsto otro proyecto sobre estos temas.

Publicado el 22/07/2013