(ANS - Roma) - Presentamos hoy la primera entrevista realizada con las preguntas planteadas por los lectores de ANS a los misioneros que están asistiendo a un curso de orientación. Cuatro preguntas para conocer mejor a don Enrique Clemente Leigman, sacerdote brasileño destinado a la Inspectoría de los Estados Unidos oeste para acompañar a los inmigrantes hispanos.

¿Cuál es la buena noticia que traerás este año en tu misión?
La buena y siempre nueva noticia es que Dios, en su generosidad de Padre, nunca se olvida de ningún pueblo. Siempre es Dios quien envía misioneros a todo el mundo. ¡Dejemos que Dios obre! ¡Confiemos en Él!

¿Qué significa para ti la palabra "casa"?
Es el lugar donde te dan la bienvenida. Sentirse como en casa significa sentirse en familia, es compartir las alegrías, tristezas, esperanzas, miedos, incertidumbres ... Es el lugar para "sentir el calor humano". Me voy de mi casa - mi inspectoría que siempre me ha acogido, escuchado, protegido, me ayudó a crecer, y me voy a otra, que conozco sólo a través de las noticias, revistas, internet. ¿Un salto en la oscuridad? ¡No! Es la esperanza-certeza que en la inspectoría "San Andrés" (de los EE.UU Oeste, ndr) no será diferente.

¿Cuáles son tus sentimientos al dejar tu país, tu inspectoría, Brasil?
¡Tengo un poco de miedo! Cuando recibí el destino, el traslado de la inspectoría de San Pío X, en Porto Alegre, Brasil, a la Inspectoría de los Estados Unidos, de manos del Vicario del Rector Mayor, don Adriano Bregolin para trabajar con los emigrantes, confieso que una lágrima me cayó y bañó mi rostro. Tengo un poco de miedo, sí, ¡pero voy con coraje y fe! La sensación es de gratitud. Doy las gracias a mi inspectoría, por su hospitalidad hacia mí, desde 1986 por la formación recibida y agradezco a mis hermanos salesianos por la amistad entre nosotros, mi actual comunidad salesiana de Massaranduba y mi querida parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, a lo cual voy a añorar mucho. Dios me ha dado la alegría de celebrar el centenario de la parroquia junto con esa gente que es tan querida para mí. Realmente gracias a todos. Y también aprovecho esta oportunidad para pedir disculpas por mis errores. Ahora, "San Andrés" me espera.

¿Cuáles son tus expectativas al llevar a cabo una nueva misión en los Estados Unidos?
Creo que otra casa está esperándome. Hay "hermanos", como en Brasil, esperando mi llegada. Parto sin grandes expectativas a parte de aprender el idioma, las costumbres, conocer gente. ¿Hace falta más que esto? Se necesita toda una vida para conseguirlos. El lenguaje es la clave de la cultura. Tengo que aprender a hablar inglés y español. El tiempo dirá lo que se necesita.

Aquellos que estén interesados ​​en entrevistar a los misioneros, aún pueden enviar sus preguntas para la preparación de ANS: ans@sdb.org

Publicado el 12/09/2012