(ANS – Rosario) – La Inspectoría del beato “Artemides Zatti” celebró en Rosario la fiesta Inspectorial, el pasado 13 de noviembre, que en torno al patrono de la Inspectoría lo han recordado como el modelo laico consagrado que supo multiplicar sus talentos a favor de los demás. Todas las obras de la Inspectoría estuvieron representadas en los directores y varios salesianos participes de la celebración.

La fiesta comenzó con la celebración de la Eucaristía presidida por el Inspector padre Manuel Cayo y concelebrada por los salesianos provenientes de las diversas casas salesianas. Además de la participación de los jóvenes de las casas de formación, muchísimos jóvenes, educadores y representantes de la Familia Salesiana. El padre Cayo en su homilía recordó la figura del beato Artemides de Zatti como modelo de laico consagrado, quien supo multiplicar los talentos a favor de los más necesitados. Además de agradecer a los  salesianos que celebraban su aniversario como sacerdotes o como consagrados y clausurar el curso de profundización de la vida de Don Bosco “I Bechi” que contó con más de cien participantes de las casas próximas a ciudad de Rosario. 

Después de un momento de compartir fraterno, en el salón de actos del Colegio San José, se realizó la entrega de reconocimientos a los salesianos que estaban  celebrando su aniversario al servicio de la iglesia como salesianos. Cada estatuilla de don Bosco fue entregada por un salesiano que destacaba los valores del consagrado festejado.

Posteriormente el padre Ricardo Cámpoli presentó un primer avance de la obra teatral “Don Bosco, el musical”. Se pusieron en escena sólo cuarenta minutos del total de la obra, que dura dos horas. En escenas seleccionadas de todo el musical se presentó la vida de “un gran santo, que apostaba a la fe y la alegría; un gran hombre que enseñaba que el amor es poesía”. Con estas palabras de la obra, el padre Cámpoli remarcó que ese santo y ese hombre “son cada uno de los salesianos que hoy celebran algún aniversario y por quienes agradecemos a Dios su vida y su entrega”.

El musical fue aplaudido por todos los presentes, quienes expresaron su emoción y alegría por el gran logro de los jóvenes y de los salesianos que actúan en la obra.

Al final el padre Inspector agradeció a todos el compromiso con la Inspectoría, la alegría expresada durante la jornada, la calidad teatral tanto de los jóvenes como de los salesianos, la vida de los salesianos en su aniversario y la presencia juvenil.

Publicado el 17/11/2011