(ANS – Ciudad del Vaticano) – El jueves 16 de enero de 2014, don Pierluigi Cameroni, Postulador General, presentò a la Cancillería de la Congregación para las Causas de los Santos, la “Positio super vita, virtutibus et fama sanctitatis” del Siervo de Dios José Wech Vandor.
La "Positio" tuvo como relator a don Zdzisław Kijas, OFM Conv., y como colaboradora a la Dra. Ludovica Maria Zanet. Un recuerdo especial va para el salesiano don Raffaele Giordano, vice postulador, a quien fue confiada, en la fase diocesana, la causa de beatificación y canonización de don Vandor, y a la que se dedicó con energía hasta el final de su vida.
Elementos estructurales de la "Positio" - que presenta en modo crítico y profundo todo el aparato probatorio documental y testimonial sobre las virtudes heroicas del Siervo de Dios - son: una breve presentación por parte del Relator; la "Informatio", es decir, la parte teológica en la que se demuestra que el Siervo de Dios ejerce de modo heroico las virtudes cristianas; la "Summarium" con las evidencias documentales y los testigos. Después de la entrega, la "Positio" tendrá que esperar su turno para ser examinada por los Consultores Teólogos de la Congregación para las Causas de los Santos.
El P. José Vandor, había nacido en Dorog, Hungría el 29 de octubre de 1909. Al padre Arturo Pehatsek, le confía su deseo de ser sacerdote y misionero. Él lo presenta al Colegio salesiano de Peliföldszentkereszt donde empieza el aspirantado y noviciado hasta la emisión de los primeros votos.
Doce años después es ordenado sacerdote en Turín, el 5 de julio de 1936 y regresa a Hungría para celebrar con los suyos la consagración sacerdotal. En el mismo año es enviado como misionero a Cuba, realizando así un sueño cultivado en el secreto de su corazón desde pequeño; hacer el bien y la salvación de las almas, sería su única preocupación durante los 40 años de trabajo en suelo cubano.
Su personalidad, su espiritualidad, su creatividad pastoral ha dejado huellas profundas en la ciudad y diócesis de Santa Clara, donde llegó el 9 de diciembre de 1954 para hacerse cargo de la construcción del Colegio de Artes y Oficios, “Rosa Pérez Velasco”, y atendiendo pastoralmente la Ermita Nuestra Señora del Carmen. Allí permaneció hasta su muerte.
Se puede asemejar don Vandor a San Francisco de Sales por la paciente docilidad, la prudente dedicación y por la sabiduría iluminada en la dirección espiritual de las almas; y a San Juan Bosco por el dinamismo apostólico, el amor a los más pobres, el espíritu de fe, alegría serena y el trato cordial. Murió en Santa Clara, el 8 de octubre de 1979.
Publicado el 20/01/2014