(ANS – Roma) – La Conferencia Episcopal Italiana (CEI), ha publicado ayer 13 de octubre, un Vademecumpara la acogida de los solicitantes de asilo y de los refugiados, aprobado por el Consejo Permanente de la CEI, a través del cual los obispos hacen efectiva el llamado del Papa Francisco de abrir sus puertas a los refugiados y a las personas desplazadas.
En el Ángelus del 6 de septiembre pasado, en vísperas del Jubileo de la Misericordia, Papa Francisco había lanzado un llamamiento "frente a la tragedia de decenas de miles de refugiados que huyen de la muerte por la guerra y el hambre, y están en camino hacia un esperanza de vida", e invitó "a las parroquias, comunidades religiosas, a los los monasterios y a los santuarios en toda Europa para expresar lo concreto del Evangelio y acoger a una familia de refugiados".
El llamado del Papa ha encontrado las iglesias en primera fila en el servicio, en la tutela, en el acompañamiento de los solicitantes de asilo y de los refugiados. De hecho, sobre cerca de 95.000 migrantes - alojados en distintos centros ordinarios de recepción (CARA) y extraordinarios (CAS) además del sistema nacional de protección de los solicitantes de asilo y refugiados (SPRAR) - diócesis y parroquias, familias y comunidades religiosas, reciben en aproximadamente 1.600 estructuras a más de 22.000 migrantes.
Para acompañar las diócesis y parroquias en este camino con los solicitantes de asilo y refugiados, la IEC publicó una especie de vademecum, que puede ayudar a identificar formas y modalidades para ampliar la red eclesial de acogida en favor de los solicitantes de asilo y refugiados que llegan a Italia, con respecto a la legislación presente y en colaboración con las instituciones.
Se trata de un gesto concreto y gratuito, un servicio, signo de acogida, que se une a los muchos otros en favor de los pobres (desempleados, familias en dificultad, ancianos solos, menores no acompañados, discapacitados, víctimas de la trata, sin hogar...) presentes en las iglesias del país: un suplemento de humanidad, incluso para superar el miedo y los prejuicios.
(Traducción, Andrés Felipe Loaiza, SDB)
Publicado el 14/10/2015