(ANS –  Ijebu-Ode) – La presencia salesiana misionera en la diócesis de Ijebu-Ode, en Nigeria, está experimentando un período "salesianamente muy rico" y esperanzador. A pesar de las dificultades que les rodean, y confiando en la Providencia y en la ayuda de los benefactores, está a punto de ver el nacimiento de una escuela de formación profesional al servicio de los jóvenes del lugar. A continuación el testimonio del P. Italo Spagnolo, SDB, encargado de la misión.

También hemos celebrado a Don Bosco de forma "solemne" en nuestro pequeño pueblo con los jóvenes, la gente y en la noche incluso con el obispo, que ha disfrutado de nuestras canciones, de las representaciones y de la cena.

Todo va bien, gracias a Dios. Estamos entrando poco a poco en las actividades de la diócesis para lo específico de nuestro apostolado para los jóvenes, mientras que damos los primeros pasos hacia el proyecto de una escuela de formación profesional tan útil y necesaria.

La excavadora en diciembre (con el calor del sol fuerte) hizo su trabajo bien y a principios de febrero hemos demarcado la propiedad que es de 4.119 hectáreas. ¡Un hermoso pedazo de tierra para ver! Pero algunos dicen que no es tan grande para un proyecto de una escuela técnica orientada... a la construcción; veremos. Mientras tanto, hemos decidido diseñar aulas de dos pisos, albergue y también residencia para la comunidad.

A la espera de benefactores consistentes, nosotros, motivados por una gran confianza, por el momento no dejamos la tierra inutilizada: hemos excavado un pozo, arado unas pocas hectáreas y comenzado a sembrar. Han comenzado las primeras lluvias y nos dijeron que, si todo va bien, el maíz sembrado en estos días podría estar maduro en tres meses.

Mientras tanto, nuestra nación está pasando por un período de incertidumbre y dificultad desde muchos puntos de vista: la inseguridad, sobre todo en el noreste, y la no oportuna eficiencia de la Comisión Electoral, ha movido seis semanas la fecha de las elecciones ya establecida desde hace tiempo para el 15 de febrero. Seguimos con la agitación, la oración y la esperanza de los acontecimientos, en la confianza de que, al igual que en similares circunstancias, todo se resolverá para bien.

La salud, gracias a Dios, es excelente. Estoy experimentando un período salesianamente rico de muchas gracias espirituales y de profunda alegría interior. Den gracias al Señor conmigo.

Publicado el 24/02/2015