(ANS – Batangas) – La Inspectoría de Filipinas Norte (FIN), a través de su Comisión de Pastoral Juvenil decidió desarrollar en 2014 un gran campamento que reuniera los jóvenes animadores de todas las presencias salesianas para ofrecer a ellos una experiencia de crecimiento y formación. Así se desarrolló, del 1 al 4 de mayo en Batangas, el "Champoree 2014".

El nombre del evento se deriva de la fusión de dos palabras "Champion" (Campeón) y "Jumboree" - un término del lenguaje Scout que identifica un campamento juvenil. La particularidad de la iniciativa fue dada por su referencia a ser "Campeón", y es el resultado de una idea del P. Gaudencio Carandang, responsable de la Comisión de Pastoral Juvenil, que a su vez se inspiró en el "Código de los Campeones" del salesiano P. Armand Robleza.

"Siguiendo el ejemplo de Don Bosco, Campeón de la juventud, este campamento se propuso dar inspiración a cada animador, para que cada uno pueda convertirse en un ‘campeón’ para las personas que encuentra en la vida, especialmente entre sus compañeros, explican los organizadores del evento. Ser un campeón no es lo mismo que ser un ganador. En el triunfo de un ganador, siempre hay una correspondiente pérdida de otra persona. Por el contrario, en cada campeón, hay siempre una inspiración para alguna otra persona. Los ganadores se hacen tales por sí solos, mientras que son otros los que te hacen un campeón".

Gracias a la colaboración del P. Dante Valero, el P. Noel Sumagui, el P. Umijun Binueza, y de varios asistentes juveniles de las distintas escuelas, parroquias y centros juveniles salesianos, y las postulantes y posnovicios, el evento Champoree ha sido capaz de ofrecer a los 400 jóvenes presentes una amplia gama de dinámicas y actividades para promover el crecimiento mutuo. Y para facilitar el recíproco conocimiento, los chicos de las diferentes obras se dividieron en equipos mixtos, cada uno dedicado a un joven santo o beato de la Iglesia (Santo Domingo Savio, San Tarcisio, los beatos salesianos Ceferino Namuncurá, Laura Vicuña y Francisco Kesy, San Pedro Calungsod, Santa Maria Gorettiy San Carlo Luwanga).

Sin embargo, entre los equipos, no hubo carreras competitivas, sino toda una serie de actividades cuyo objetivo era ser una fuente de inspiración para los demás. Hubo momentos para la reflexión, personal y de grupo, y el intercambio necesario para asimilar las ideas recibidas y ponerlas en práctica en la vida cotidiana.

Publicado el 07/05/2014