(ANS – Roma) – Ayer fue publicado el Mensaje de Benedicto XVI para la Jornada Misionera Mundial, que se celebrará el 21 de octubre del 2012: “Llamados a hacer resplandecer la Palabra de Verdad”. Se renueva la importancia del anuncio misionero y saber compartir la fe. El Consejero general para las Misiones insiste en la participación  salesiana como compromiso con la Iglesia Universal.

El mensaje del Papa se coloca en un año que coincide con el 50° del Decreto conciliar “Ad gentes”, la apertura del Año de la fe y el próximo Sínodo de Obispos sobre la Nueva Evangelización.

El Papa ha presentado en forma clara los puntos claves de la iglesia para lanzar y profundizar cualquier iniciativa misionera. En primer lugar la misión está en el corazón mismo de la iglesia: “Tenemos necesidad de volver al mismo espíritu apostólico de las primeras comunidades cristianas, que, pequeñas e indefensas, fueron capaces de anunciar, testimoniar y difundir el Evangelio en todo el mundo, hasta entonces, conocido”. 

El Papa, también insiste, el campo de la misión en el mundo moderno se ha hecho cada vez más extenso; sea porque, “se ha dilatado el número de aquellos que no conocen todavía a Cristo, sea porque, en los países de antigua tradición cristiana los hombres están frecuentemente desorientados”. “Gran parte de la humanidad, tiene  hambre y sed de Dios, debe ser invitada al pan de la vida y al agua viva, como la Samaritana que se acerca al pozo de Jacob y dialoga con Cristo. Como narra el Evangelio de Juan (…) la mujer al inicio no entiende, permanece  a nivel material, pero lentamente es conducida por el Señor a cumplir un camino de fe que la lleva a reconocerlo como el Mesías”.

De frente a estos desafíos el compromiso misionero viene re-propuesto como la necesidad de compartir la fe por parte de todos los miembros de  la Iglesia: obispos, en primer lugar, por ser “directos responsables de la evangelización del mundo”, pero también sacerdotes, diáconos, religiosos, religiosas y laicos. Y con la conciencia,  reclamada varias veces en el texto, que el núcleo central de la misión permanece siempre la mismo: “el Kerigma de Cristo muerto y resucitado para la salvación del mundo, el Kerigma del amor de Dios absoluto y total para cada hombre y cada mujer”, del cual derivan también las intervenciones de caridad, justicia, instrucción, asistencia médica, emancipación….

“Como salesianos nos sentimos plenamente en sintonía con lo que el Papa ha indicado. – hace notar el padre Václav Klement, Consejero para las Misiones salesianas – El Capítulo General 26, celebrado en el año 2008, recuperó y profundizó el slogan de Don Bosco: ‘da mihi animas’. Desde entonces, como salesianos, hemos iniciado un camino de renovado compromiso por la evangelización, señalando algunas dinámicas que el Papa indica en su mensaje: ser sorprendidos por la Fe, dejarse evangelizar y evangelizar al mismo tiempo”.

“La Congregación salesiana lanzó para este año 2012 – prosigue el padre Klement – el tema de la evangelización colocando la atención a nuestra experiencia en Asia y privilegiando la dimensión del narrar la historia de Jesús a los pueblos que viven en contextos multi religiosos”.

Publicado el 26/01/2012