(ANS – Nueva York) – "Da mihi animas", el canto para el Bicentenario del nacimiento de Don Bosco, resonó de fondo mientras Embajadores, miembros de las delegaciones de las Naciones Unidas, salesianos, estudiantes y colaboradores, representantes de las organizaciones de la sociedad civil y líderes religiosos y laicos hacían su entrada en el pabellón 4 de la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, el 5 de marzo. Estaban allí para asistir a una fiesta en honor del carisma salesiano, con motivo del Bicentenario.
Por P. Thomas Brennan, SDB
Representante de los Salesianos en las Naciones Unidas
Se trataba del tercer evento que tuvo lugar en las Naciones Unidas para resaltar el carisma salesiano en ocasión del Bicentenario, esta vez con el tema "Responder a las necesidades de los jóvenes y de los que viven en la pobreza: una respuesta salesiana a múltiples dimensiones" (disponible en Internet).
El cardenal salesiano Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, arzobispo de Tegucigalpa, fue una vez más el orador principal. Desafió a los presentes a ser proféticos en el afrontar los retos de nuestro tiempo y ha centrado su discurso sobre el derecho humano al agua y a los servicios higiénicos.
A continuación, intervino el P. Juan de la Cruz Rivadeneira, SDB, que presentó el impacto de las industrias extractoras sobre la vida, la salud y la cultura del pueblo Shuar en Ecuador. En esas regiones el agua es desviada de las necesidades de las poblaciones para ayudar a administrar y mantener las nuevas industrias que están devastando el medio ambiente y la salud de los Shuar.
"Esta realidad, agrava el futuro de los jóvenes y de los niños, que son despojados de sus territorios legítimos, y pone en peligro su vida y el desarrollo armonioso de su cultura y espiritualidad". El salesiano concluyó su discurso invitando a cantar una versión del famoso himno "Salve Don Bosco Santo" que presenta los versos compuestos por jóvenes Shuar para expresar su deseo de preservar su propio estilo de vida.
En nombre del Sr. Sam Kutesa, Presidente de la 69ª sesión de la Asamblea General, habló el honorable Embajador Arthur Kafeero, Jefe de Gabinete, quien agradeció a los salesianos por su dedicación, desde hace más de 25 años, por los jóvenes de Uganda, y destacó la necesidad de cooperar con organizaciones de la sociedad civil para lograr una agenda global post 2015 verdaderamente transformadora.
Luego tomó la palabra Mons. Bernadito Auza, Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU: destacó el papel de los salesianos como educadores, especialmente de los jóvenes marginados o excluidos, subrayando su presencia en 132 países, y rindiendo homenaje al Sistema Preventivo, afirmando que los Salesianos "nos revelan el secreto del éxito de Don Bosco, que es educar con amor y lograr desarrollar una sana autoestima entre los jóvenes a través de actividades creativas".
Antes de las presentaciones, los distintos ponentes y el moderador de la mesa redonda, el P. Brennan, se habían reunido con el Excmo. Kutesa, que había compartido con ellos algunas de las prioridades para la sesión de la Asamblea General y expresó su gratitud por el trabajo de los Salesianos.
El encuentro terminó con una oración por los trabajos de la Asamblea General de la ONU.
(Traducción de Andrés Felipe Loaiza, SDB)
Publicado el 11/03/2015