(ANS – Roma) – Hay 3.200 kilómetros de frontera entre México y Estados Unidos, con 23 puestos de control. Un lugar donde concentra una de las migraciones más grandes del mundo. Por esta razón, en la tarde del jueves 20 de marzo, el Inspector de México-Guadalajara, P. Cleofás Murguía Villalobos, y el Inspector de los EE.UU. Oeste, el P. Timothy Ploch, ofrecieron unas "Buenas noches" conjuntas.

Muchas las situaciones concretas: mexicanos indocumentados que son repatriados, inmigrantes que deciden regresar a sus países de origen, migrantes que llegan a la ciudad fronteriza con la intención de encontrar un trabajo o entrar en los Estados Unidos. Una realidad que se describe como oportunidad para los mexicanos y peligro para los estadounidenses. Una zona de tráfico ilegal de drogas, armas, dinero y personas, una área que vive las consecuencias de las tensiones sociales y políticos de las dos naciones.

La situación de violencia e inseguridad en los últimos años constituye un verdadero reto: por ello los salesianos han puesto en marcha propuestas de educación para la paz, la integración social, la prevención de drogas y el contraste al espiral de la delincuencia organizada.

La presencia de los hijos de Don Bosco es en los ambientes populares y en las periferias de la ciudad fronteriza. Desde el inicio del "Proyecto Frontera" (1987) hasta la fecha, se han abierto 13 oratorios y 2 centros comunitarios, colaboran en 6 parroquias (una en los EE.UU.), una escuela con tres niveles de estudio, y un centro de escucha para migrantes e indigentes - todas las estructuras que, según la tradición salesiana, ofrecen programas de educación, evangelización y promoción humana.

Las obras salesianas viven un auténtico contexto misionero, donde se busca promover la experiencia del encuentro con Jesús, para recuperar y profundizar la fe y las auténticas expresiones de la religiosidad popular. Desde el principio, además, han promovido el voluntariado: han llegado jóvenes de California y Texas, Austria, España, Italia, República Checa, Colombia, Argentina... a quienes va todo el agradecimiento de los salesianos. Y muy fuerte y útil ha sido la sinergia entre los grupos del Movimiento Juvenil Salesiano (MJS) de las dos Inspectorías.

Después de la visita de Conjunto a la Región Interamérica, celebrada en El Salvador en 2011, se está estudiando una propuesta para crear una comunidad salesiana de carácter internacional y de aumentar la sinergia con la Familia Salesiana y los laicos.

"Como hijos de Don Bosco soñador, miramos con optimismo a la incidencia social que puede seguir teniendo nuestra presencia salesiana y las mejores condiciones de vida para todos, especialmente para los jóvenes de las dos naciones, ofreciéndoles la posibilidad de experimentar la esperanza de un futuro más fraterna, más justa y más humano, para participar así en la construcción del Reino anunciado por Jesús en el Evangelio".

Publicado el 24/03/2014