(ANS – Roma) – La Segunda Jornada de Espiritualidad de la Familia Salesiana celebrada en Roma ha afrontado la figura de Don Bosco como Testimonio y maestro de la relación entre Dios y el hombre.

Momento fundante de esta renovada y profunda visión del carisma vivido en Valdocco ha sido la relación de Don Aldo Giraudo, che desarrolló articuladas consideraciones sobre la sensibilidad espiritual y sobre la enseñanza del santo de los jóvenes. Citando la iminente publicación de una vasta antología de los textos de Don Bosco, que sin duda marcará el próximo Capítulo General, el teólogo salesiano puso en evidencia que, si bien Don Bosco no escribió su propia “Summa” espiritual, siempre estuvo en grado de realizar una fecunda y personal síntesis que ha transmitido, con la palabra y el ejemplo, a sus seguidores.

Don Bosco bebe de la escuela espiritual italiana del 1500 y 1600, de figuras como San Francisco de Sales hasta llegar a San Alfonso María de Ligorio e Ignacio de Loyola, enfocándose en el tema de “donarse completamente a Dios”. Esta es la clave de su acción y su insistente invitación a los jóvenes.

Hicieron eco a la anterior relación, además de mostrar su actualidad, los testimonios presentados en el aula que en su conjunto hacen ver cómo los Salesianos están hoy presentes y comprometidos en las periferias sociales y en las fronteras culturales. Intervinieron Don Valerio Baresi, Sor Marta Drei, Gaia Lauri y Cecilia Corrias: proyectos antiguos que renacen por la presión de nuevos desafíos, presencia profética en áreas urbanas relegadas, cercanía a los jóvenes en los patios físicos y digitales, formación y desarrollo de familias, construcción de casas para familias que nos las tienen.

Por la tarde se reflexionó sobre la caridad pastoral. Don Alberto Martelli, Director Editorial de la ELLEDICI, ha hecho notar cómo el “hacer” resume de modo práctico la vida de Don Bosco. A la luz de esta experiencia espiritual, se hace notar que el programa de los religiosos y laicos no es un elenco de proyectos por realizar sino la asunción del estilo de donación practicado por Jesús. Eso vale para consagrados y laicos. Roberto Lorenzini, SSCC, afirmó que la santidad es la respuesta al amor de Dios, y es algo posible para todos. Es aquí donde nace el compromiso en el mundo como expresión de caridad cristiana, también sobre el delicado y fascinante terreno de la vida política, como “honestos ciudadanos”. Sor Carmela Busia, FMA, presentó su experiencia con los jóvenes haciendo ver la importancia de algunos elementos de la amistad espiritual que levantan la autoestima y abren la vida a la aceptación de Dios, como primeros pasos para una vida renovada.

La referencia al Aguinaldo del 2014 fue frecuente en las intervenciones de los ponentes, además de que el mismo Rector Mayor hiciera lo mismo las veces que intervino durante la jornada. “No podríamos amar al prójimo si antes no tuviéramos la experiencia de ser amados por Dios”.

En medio de este ambiente fue celebrada por la tarde la Eucaristía con más de 400 participantes, haciendo de la misma el momento precioso de dónde sacar motivaciones y fuerzas para entregar la propia vida a los jóvenes. La homilía fue pronunciada por Don Filiberto González, Consejero del Dicasterio para la Comunicación: "La exclamación que pone Marcos en la boca de las personas cuando son testigos de lo que hace Dios a través de Jesús perdonando y curando al paralítico, tendría que ser la exclamación de la gente de hoy al ver la acción evangélica de la Iglesia". 

Publicado el 18/01/2014