(ANS – Roma) – Muchas  personas en diferentes países del mundo han testimoniado que la peregrinación de la reliquia de Don Bosco estuvo en grado de atraer fieles cristianos y hombres de buena voluntad, de revitalizar el carisma salesiano y animar las comunidades religiosas. El último testimonio proviene de Tierra Santa, y da cuenta de ello sor Anna Nava, Hija de María Auxiliadora (FMA), quien escribió una carta a Don Pascual Chávez, Rector Mayor de los Salesianos.

"Nuestro agradecimiento a usted y a su Consejo por habernos regalado tanta felicidad con la presencia de las reliquias de Don Bosco. No podían hacernos un regalo mayor, se sentía como algo que nos pertenece en lo profundo, como Familia Salesiana. Pero ¡qué alegría tener aquí a Don Bosco! ¡Finalmente llegó a Tierra Santa!" Cuenta la hermana salesiana, Directora de la presencia de las FMA de Nazaret.

La religiosa manifiesta cómo la presencia de la reliquia del brazo derecho de Don Bosco – el brazo que bendice – fue una bendición para todos y dejó "un signo seguro de paz en Medio Oriente".

"Un país maltratado - añade sor Nava - pero único en su género y aún habitado por el Príncipe de la Paz. Vivimos momentos de miedo es cierto, pero Él nos da el valor de creer firmemente que está presente y nos recarga de nuevo entusiasmo para su tierra que sentimos nuestra tierra en todos los aspectos".

Al concluir su carta sor Nava asegura sus oraciones y la de sus hermanas para todos los salesianos del mundo; las presentará al Señor en la Eucaristía del próximo domingo, que se celebrará en presencia de la urna en la Basílica de la Anunciación.

Publicado el 13/09/2013