(ANS – Medellín) – La obra Ciudad Don Bosco, de la Inspectoría de Medellín Colombia, en uno de sus programas se ha dedicado a atender a los niños trabajadores de las minas de carbón. Su principal tarea es el acercamiento a las familias y brindar a los menores nuevas oportunidades educativas. Varias entidades se han comprometido en esta tarea.

En la región llamada  Sinifaná, rica en minas de carbón, la minería se explota de manera artesanal e ilegal y los niños son utilizados como fuente de producción de bajo costo. En la cultura del lugar se había llegado a la tradición de “considerar normal el trabajo de los niños dentro de las minas como un aporte económico a sus familias y como estrategia de los explotadores ilegales de las minas”. En la zona cerca de 6.000 niños estaban expuestos al trabajo en las minas si no se les ofrecían alternativas.

La comunidad salesiana a través de la obra “Ciudad Don Bosco” se unió  a diversas entidades el gobierno y ONGs para defender los derechos de los niños trabajadores de las minas y poderles garantizar la educación, salud, nutrición, formación en valores y derechos. Además de favorecer la creación de redes sociales para reconocer e intervenir en la problemática.

Ciudad Don Bosco, en el proyecto, iniciado en el 2006, se ha propuesto como metas hasta el  año 2015 impulsar una acción preventiva integral para que los menores no vayan a las minas; controlar la minería ilegal; hacer valer el derecho a la educación de los menores; realizar una alianza estratégica entre la educación pública y Ciudad Don Bosco; atención integral y formación para el trabajo diferente a la mina;  facilitar créditos educativos y empresariales.

Además las entidades del gobierno se han comprometido en la realización de un plan integral de Protección Social en la región de Sinifaná, integrados a los planes de Gobierno; fortalecimiento de los Consejos municipales de Política Social, liderados por los alcaldes; e integrar a Comunicación Pública de la Gobernación al equipo de trabajo para que el tema se empiece a tratar como un problema de política pública.

En la actualidad cerca de 300 niños y jóvenes reciben los beneficios del proyecto, que pretende erradicar el trabajo de los niños en las minas y rescatar a aquellos que se encuentran en riesgo. El 40 por ciento de los niños que pertenecen al programa fueron trabajadores de las minas y el 80 por ciento del total están entre los 10 y los 15 años.

Los muchachos participan en la modalidad de semi-internado y reciben almuerzo, refrigerio, programas de recreación, deporte, cultura, nutrición y psicología. Hay también un refuerzo académico, del que se encargan los pedagogos de la institución, y los niños estudian en las instituciones públicas.

160 jóvenes entre los 15 y 18 años, reciben formación en cinco especialidades: confecciones, ebanistería, metal mecánica, mecánica automotriz y técnicas agropecuarias.

Con este proyecto se ha disminuido en un 70 por ciento el trabajo de los menores de edad en las minas de carbón.

Publicado el 12/06/2012