(ANS – Rimini) – Dos “corredores humanitarios” para poner a salvo en los próximos meses, con vuelos aéreos, a 2000 refugiados, respectivamente, del Líbano y de Marruecos, permitiéndoles huir de la guerra sin riesgo de morir en el mar. Esta es la iniciativa histórica, por primera vez hecha realidad en Europa, en que la Asociación Papa Juan XXIII y la Comunidad de San Egidio han anunciado  en el encuentro “El coraje de ser humanos”, (Rimini, 30-31 octubre).

“Hemos trabajado juntos para crear los dos canales humanitarios – ha dicho  Andrea Riccardi, fundador de San Egidio – y para llegar hasta aquí ha habido que negociar duramente con el gobierno italiano. Así pues, obtendremos visados humanitarios para las situaciones dramáticas constatadas. ¿Por qué estas personas, ya tan puestas a prueba, deben aún soportar el examen de la muerte por los caminos de los Balcanes o en el Mediterráneo? Montando una oficina en el Líbano y en Marruecos, estamos creando las listas de las personas que serán acogidas y pensamos que esto pueda ser un modelo: en Europa hasta ahora nadie lo había hecho todavía”.

No se trata de ir buscando nuevos emigrantes, sino de evitar tragedias prácticamente anunciadas, llevando con seguridad a los refugiados que, de otro modo, buscarían otros caminos para entrar en Europa.

“Los refugiados deben llegar a Italia en un vuelo regular, es impensable que corran el riesgo de acabar en el fondo del mar como les ha sucedido a miles y miles de emigrantes. Serán acogidos por nuestras familias y por nuestras parroquias”, ha manifestado Paolo Ramonda, responsable general de la Comunidad Papa Juan XXIII.

Los primeros beneficiados han sido ya individualizados, sobre la base de criterios bien precisos, que permitan la entrega de visados humanitarios: se trata de 12 familias, de entre 4/8 miembros cada una, con niños enfermos graves, o familias que, viviendo bajo una tienda desde hace ya 3 ò 4 años, a pesar haber sobrevivido habrían afrontado los viajes por mar. “Para cada uno de ellos tenemos ya quien les acoja, y todo está organizado”, han dicho en el encuentro de Rimini.

La idea se presenta también como un excelente ejemplo de trabajo de asociaciones de voluntariado juvenil en red entre organismos cristianos y de ecumenismo solidario. De hecho, han manifestado su adhesión al proyecto, el FOCSIV – federación de 72 asociaciones cristianas de voluntariado internacional, de las que es también socio VIDES, la asociación de voluntariado juvenil de las Hijas de María Auxiliadora – y la Iglesia Valdense, que contribuirá económicamente.

Publicado el 03/11/2015