(ANS – Córdoba) – A través de una carta publicada en el sitio web de los salesianos de Argentina Norte, el inspector P. Manuel Cayo, comparte lo que ha significado la visita del X Sucesor de Don Bosco, Don Ángel Fernández Artime, donde comenta: “Don Bosco nos ayudó en estos días a poner en el centro de su Fiesta de Cumpleaños a Jesús, al Dios compasivo que sale a nuestro encuentro y nos sostiene”.  A continuación, algunos fragmentos de su carta.

Les escribo desde Pilar donde estamos compartiendo los Ejercicios Espirituales animados por el Padre Ángel, con más de 60 directores de toda Argentina.

Estos días que estamos viviendo con la presencia del X Sucesor de Don Bosco entre nosotros están siendo intensos e inolvidables. Seguramente habrán podido palpar que el Encuentro Joven del Bicentenario ha sido una experiencia fundante que marcará un antes y un después de nuestra presencia salesiana en Argentina. Porque ha sido fruto de un camino intenso, un tiempo de cosecha de todo lo que venimos acompañando.

El P. Manuel comenta que en la celebración de la eucaristía se mostraba la presencia de Domingo, Miguel, Ceferino y Laura, quienes guiaron los momentos principales:

Domingo nos recordaba al inicio: “Don Bosco dice que la alegría no es una explosión pasajera: es un regalo en una caja que se abre sólo cuando reconocemos la belleza de la vida que Dios nos da, y que nos pone en contacto con quienes somos realmente (…).

Laura, en el momento de las ofrendas, aparecía entre dos jóvenes que subían y bajaban de unas telas que desde el techo llegaban hasta el piso… Y nos decía: “Nuestra vida tiene mucho que ver con esto que estamos viendo. Estamos invitados a confiarnos y aferrarnos con fuerza a las telas de la vida en Dios, y desde ahí movernos, como en una danza, viviendo (…).

Como ven: Don Bosco nos ayudó en estos días a poner en el centro de su Fiesta de Cumpleaños a Jesús, al Dios compasivo que sale a nuestro encuentro y nos sostiene. Nosotros queríamos regalarle todo nuestro cariño y adhesión, y él terminó haciéndonos un regalo más grande todavía: el de ayudarnos a reconocernos en su sueño, el de descubrir que lo más importante de todo es el tesoro escondido, la perla enterrada… Por eso estos días han sido tan claves y seguramente darán nuevos frutos. ¡Por eso los invito a que acompañemos en cada casa lo que vaya naciendo de estos días!

Es posible encontrar la carta completa en el sitio de los Salesianos Argentina Norte

Publicado el 14/09/2015