(ANS – Asunción)– Luego de la llegada del Papa Francisco a Paraguay y de actos de bienvenida el 10 de julio, el Papa ha tenido un itinerario en el cual tuvo la oportunidad de visitar el hospital "Niños de Acosta Ñu", se trasladó a los diferentes lugares en el mismo auto que usó San Juan Pablo II en 1988 y se dejó atrapar por los niños de dos coros que cantaban en su acogida. Aquí una crónica de los principales eventos, tomados del sitio de los Salesianos del Paraguay.

El Papa llegó poco antes de las 3:00 pm. (hora local) al aeropuerto de Asunción (Paraguay), tercer y último país que visitará en su viaje apostólico por América Latina.

Dos coros de niños recibieron al Papa Francisco con cantos en idiomas español, guaraní y aché, a su llegada a Paraguay. Tres menores se acercaron al Santo Padre para entregarle presentes, pero uno de ellos le hizo un pedido singular.

Rodrigo Hermosa, un niño de 12 años con problemas en un brazo, fue uno de los que se acercó a Francisco. Al recibir el abrazo del Papa, Rodrigo le pidió que por favor vaya a saludar a sus compañeros del coro. El Santo Padre cumplió el deseo del pequeño algunos minutos más tarde y se acercó a sus amigos, recibiendo un abrazo colectivo de los pequeños a quienes bendijo con afecto.

Este día, aseguró después un grupo de niños del coro, se ha convertido en “el mejor día de nuestras vidas, pero para siempre”. Es posible ver el vídeo del momento en el que el Papa se deja atrapar por los niños.

En su discurso inicial el Papa comentó;“Queridos amigos, en la voluntad de servicio y de trabajo por el bien común, los pobres y necesitados han de ocupar un lugar prioritario. Se están haciendo muchos esfuerzos para que Paraguay progrese por la senda del crecimiento económico, se han dado pasos importantes en el campo de la educación y la sanidad; que no cese este esfuerzo de todos los actores sociales, hasta que no haya más niños sin acceso a la educación, familias sin hogar, obreros sin trabajo digno, campesinos sin tierra que cultivar, y tantas personas obligadas a emigrar hacia un futuro incierto; que no haya más víctimas de la violencia, la corrupción y el narcotráfico”. Ver vídeo del discurso.

Y finalmente, informado por ACI Prensa, el Papa usó el mismo Peugeot blanco 405 SR, 1988, motor 1600; éste fue donado hace 27 años por Automaq y que luego de la visita de San Juan Pablo II, permaneció en exhibición; y lo utilizó para trasladarse de la Nunciatura Apostólica, donde está hospedado, hasta el Hospital Pediátrico de Acosta Ñu.

Es posible encontrar muchas fotocrónicas y vídeos de la visita del Papa, en el sitio web de los Salesianos del Paraguay.

Publicado el 13/07/2015