(ANS - Katmandú) – Purna Kumar Dangol es un profesor de la Escuela Técnica Don Bosco "Thecho" Katmandú, Nepal. En los últimos cuatro años ha impartido cursos de especialización en electricidad, ahora trabaja con el Equipo de Rescate Don Bosco. Esta es su historia.

Vivo en Bulu, a una media hora de la escuela. El 25 de abril, el día del primer gran terremoto, mi casa y la de mis vecinos no colapsaron, algunas estructuras más débiles cedieron; sin embargo, nadie murió. (...)

Hasta el terremoto se peleaba y se discutía entre los vecinos. Ahora cocinamos juntos, comemos juntos, dormimos bajo el mismo refugio. Puedo decir una cosa buena sobre este terremoto nos unió y nos ha hecho sentir más cercanos.

El día después del terremoto, el domingo, nos encontramos con el padre Juan Jijo, SDB. Nos alegramos de ver que los edificios escolares no fueron dañados en absoluto. (...) Le dijimos que habíamos oído que otros pueblos de los alrededores no fueron tan afortunados como el nuestro. Nos pidió que fuéramos a averiguar qué estaba sucediendo. Él nos dio su motocicleta y la cámara.

Fuimos a Lele, a unos 10 km de distancia. Visitamos los nueve distritos de la aldea. Los daños fueron muchos, casi totales. Charlamos con la gente simpatizamos con ellos y tomamos muchas fotos y les dijimos que éramos de Don Bosco y que le preguntaría al sacerdote si podríamos extender la ayuda a ellos.

De vuelta en Thecho, el padre Jijo no dudó un momento. Nos subimos a su camioneta y fuimos en busca de alimento. (...)

El lunes siguiente nos enteramos que muchos otros pueblos se encontraban en extrema dificultad. Bueno, hemos ampliado nuestras operaciones paso a paso, también haciendo seguimiento de los lugares ya visitados. Cuando empezamos a recibir mensajes que proporcionan apoyo económico, nos procuramos grandes cantidades de material que distribuido, tales como artículos de primera necesidad a cada familia durante 5 días, me tocó ir a cada uno de los pueblos todos los días.

En varios poblados fuimos los primeros en ofrecer ayuda. Lo hicimos de manera imparcial y sin condiciones previas. No hace mucho nos veían sólo como una institución educativa, a cargo de un grupo de Cristianos de la India. Ahora nos ven como seres humanos con una fuerte empatía por todos los necesitados. (...)

La confianza de la gente ha crecido y hoy en Don Bosco, representado por cada uno de nosotros, es bienvenido en todas partes - en las familias, en los pueblos, en las oficinas gubernamentales. (...)

Desde entonces y hasta la fecha que yo vengo a la escuela de Don Bosco lo más pronto posible. Hacemos "turnos de guardia" todos los días, aunque no vengo como un "Maestro de electricidad" de la escuela! Yo no tomé ni un día libre, porque yo no vi al padre Jijo tomarse un solo día libre. Él es una inspiración para nosotros, supongo, y Don Bosco es una fuente de inspiración para él!

Publicado el 15/06/2015